Dildo réplica de pene de Nacho Vidal

Descripción

Dildo réplica de pene de Nacho Vidal

Te presentamos el dildo Nacho Vidal. El consolador Nacho Vidal es lo que estás buscando.

Se trata de un consolador que es la réplica exacta del enorme pene de la estrella del porno Nacho Vidal.

El consolador Nacho Vidal está fabricado con todo lujo de detalles, y tiene una forma y un tamaño que te van a encantar.

Cuando uses el dildo Nacho Vidal podrás sentir y tocar las venas, el glande y los testículos del pene del grandísimo actor porno.

Además va provisto de una ventosa por si quieres sujetarlo en el suelo, una pared, una mesa o cualquier otro lugar,  y que se mantenga erguido por sí mismo para que tu única preocupación sea disfrutar.

El consolador Nacho Vidal te hará disfrutar de esas fantasías en las que eres la protagonista de una película porno, pero con la ventaja de que tú vas a controlar todos los movimientos y vas a decidir lo que pase a cada momento.

Haz realidad tus fantasías más excitantes.

¿Te gustaría tener a Nacho Vidal en tu cama? Pues ahora es posible.

Elige entre distintos modelos del consolador Nacho Vidal

Por otro lado, también vas a poder elegir el color del dildo, ya que además del color carne (color natural) disponemos de otros preciosos colores que aunque se apartan de la naturalidad ganan en estética y, por qué no decirlo, en morbo.

Todos los modelos, sean del color que sean, tienen el mismo tamaño y la misma superficie y forma, y te harán disfrutar exactamente igual.

Además, si quieres probar juegos distintos y más reales, tenemos también para ti el mismo consolador Nacho Vidal pero articulado.

Se trata de un modelo mucho más flexible y con mayor movilidad. Podríamos decir que es mucho más parecido a un pene de verdad. El dildo está fabricado con TPR, un material de alta calidad que tiene la flexibilidad y dureza necesarios para que si parezca un pene real.

Características:

– Longitud insertable: 24 cm.

– Longitud total: 25 cm.

– Diámetro: 6 cm.

– Peso: 470 gramos.

– Material: TPR.